Truquitos de belleza

Estreno esta sección hablando de un pequeño gran descubrimiento que he hecho hace poco y que todavía me tiene alucinada.

Siempre he tenido problemas de ojeras, duerma o no duerma siempre es lo mismo, sobre todo en el ojo izquierdo, que parece que se me hunde para dentro y afea muchísimo. Así que podéis imaginaros la de cosas que he probado, de todo o casi.

Durante mucho tiempo me fue muy bien con el Touche Éclat de Yves Saint Laurent (que sigo pensando que es una auténtica maravilla, aunque se suponga que sólo es un iluminador, a mí desde luego me funcionaba tapándome las ojeras). El problema es que no dura ni siquiera toda la mañana (confieso que además yo soy muy nerviosa y me toco la cara con bastante frecuencia) y, lo más importante, lo que me servía con 30 años ya no sirve 10 años después. Así de simple.

Emprendí la búsqueda de un producto que se adaptara a mis nuevas circunstancias (qué se le va a hacer) y una de las prioridades en las que me basé fue, no sólo que realmente cubriera las ojeras, sino que no marcara las arruguitas del contorno de ojos, que es lo que faltaba, arreglar un problema para provocar otro. Me metí en todos los foros habidos y por haber, consulté por aquí y por allí. Probé varios productos (hablaré de algunos de ellos en otro momento) y un buen día me atreví a pedir un producto del que habían hablado algunas foreras y blogeras y que en un principio es maquillaje de especialistas.

Se trata de la marca Kryolan, no sé si ya la conocéis, yo no sabía nada de ella hasta hace unos meses. Pero desde luego ha sido toda una revelación.

Después de mucho consultar (y mucho dudar), me decidí e hice un pedido que constó de dos bases de maquillaje Supracolor, una del, al parecer, famoso color salmón 576 y otro del color 1W.

 Un color, el 576, es como más anaranjado y el otro, el 1W, es más color carne clarito, puede incluso servir de iluminador.

Para aplicarse este producto se recomienda un pincel (la zona del contorno de ojos es muy delicada y no es plan de provocar más arrugas por no aplicar bien las cremas y el maquillaje) y luego echar unos polvos traslúcidos encima del maquillaje.

Y ahí está el milagro. Pensé que sería una prueba más no del todo fallida pero sí decepcionante. Y para nada fue el caso. Cuando apliqué los polvos no me podía creer lo que veía, no sólo el maquillaje había cubierto completamente mis ojeras (sobre todo la rebelde del ojo izquierdo, que es la que me lleva por el camino de la amargura), sino que con los polvos parecía que era mi propia piel, mi color, etc. Y dura todo el día!!!! [Eso sí, después de meses de experiencia, puedo decir que hay que aplicarse polvos, pero muy, muy pocos, y así lo explico en el vídeo]

El problema (para los que esto les resulte un problema, claro) es que al ser un producto de especialistas del maquillaje sólo se puede comprar por Internet, pero la empresa on-line que los vende (al menos la que yo he utilizado, otra que encontré no era tan completa ni de lejos) funciona perfectamente y te permite pagar contrarreembolso para los que lo prefieran así. Mi pedido tardó en llegar unos tres o cuatro días, no más, y los precios son muy, muy competitivos (salvo el de los pinceles, que a mí me resultan un poco caros, la verdad).

En fin, que recomiendo este producto para todas aquellas que quieran cubrir algún defectillo, ya sean las famosas ojeras o manchas en la cara de cualquier tipo (no sólo sirve para el contorno de ojos, se puede aplicar en cualquier parte de la cara). Además no reseca nada la zona de la piel donde se extienda. La verdad es que todavía no le he encontrado ningún defecto.

Más adelante colgaré un vídeo en el que podréis ver cómo se aplica y cuán maravilloso es.

Mientras tanto, espero que os haya servido toda esta parrafada ;)